jueves, 31 de agosto de 2017

¿Está preparado el mundo para que todos tengamos coche eléctrico? / Is the world ready for electric car?

El vehículo a pilas es el futuro. ¿Podrán las redes eléctricas soportar la carga de millones de automóviles?
 
Cristina Calvo se mueve en coche eléctrico por Madrid desde hace un año. “Voy al trabajo, a recoger a los niños y a hacer la compra con él”, afirma. Esta ingeniera de 50 años conduce un cero emisiones que, como los otros 19.037 vehículos eléctricos puros (8.041 turismos) registrados en España en 2016, puede aparcar gratis en zonas de estacionamiento regulado y adentrarse en el centro de las ciudades incluso durante los picos de alta contaminación. Estos vehículos a pilas suponen tan solo el 0,07% del parque automovilístico español. No constituyen una carga importante en el consumo nacional de energía, pero, ¿qué pasaría si todos los coches fueran eléctricos ahora mismo? ¿Estaría la red preparada para que todos nos desplazáramos como Cristina Calvo?
 
“Lo está”, afirma Rafael Sánchez, responsable de estudios de análisis industrial de Endesa. “La red podría alimentar todo un parque automovilístico como el actual [más de 28 millones de coches en España], pero eléctrico, siempre que la carga se organizase de manera inteligente”, añade el economista.
 
 
 
 
 
“La gente piensa que la mayor parte de la energía se utiliza para generar electricidad, pero este uso solo constituye un 20% de la energía primaria total que se consume en España. Al transporte, por ejemplo, se destinan dos quintos, el doble”, argumenta Paco Segura, coordinador general de Ecologistas en Acción. De hecho, el sector de mayor consumo de petróleo sigue siendo el transporte, con el 67%. En España solo el 10% de la electricidad viene de la combustión del fuel y el 25% del gas natural.
 
Lo mismo ocurriría en Europa y en todo el mundo. La Agencia Internacional de la Energía (IEA en inglés) asegura que el impacto de un parque mundial 100% eléctrico es asumible. “Nuestros análisis demuestran que con una política de carga flexible los picos de demanda pueden ser gestionados”, explica Marine Gorner, portavoz de la IEA. Gorner asegura que si la pregunta formulada es hipotética, el interrogante real es si podremos generar más electricidad y distribuirla para incorporar un parque mundial electrificado.
 
¿Cuánta energía haría falta?
 
De toda esa electricidad generada en España, tan solo el 18% o 19% tendría que ser destinado a la recarga de un parque exclusivamente eléctrico, de acuerdo con un estudio elaborado por Endesa junto a Eurelectric en 2015 y presentado al Parlamento y la Comisión Europea. Esa cifra crece hasta el 21% para toda Europa, donde circulan actualmente 249 millones de vehículos, según Endesa, que apela a ese informe. En 2014 ese consumo era del 0,03% de toda la energía generada, según la Agencia Europea del Medio Ambiente.
 
Si todos los 1.200 millones de automóviles que circulan hoy por el planeta fueran eléctricos acapararían 2.300 teravatios/hora (TWh) al año, suponiendo que recorriesen una media de 13.000 kilómetros por año, con un consumo de 0,18 kilovatios por kilómetro recorrido (la media de los modelos en el mercado). Esto constituye el 10% de toda la energía (21.000 TWh) que se consumió en todo el planeta en 2016, de acuerdo con cálculos de la Agencia Internacional de la Energía.
 
¿Cuántos coches eléctricos habrá?
 
Hay más de dos millones de vehículos eléctricos en el mundo. Son solo el 0,2%, de todos, aunque su número crece exponencialmente. En 2015, el stock mundial de cero emisiones superó el millón. En solo un año se dobló. Un incremento vertiginoso del que son responsables grandes economías como China y Estados Unidos y que augura una progresión positiva. Esa velocidad de crecimiento debería acelerarse para cumplir con las metas marcadas en el Pacto contra el cambio climático de París y llegar en 2040 a los 600 millones de estos automóviles.
 
En España, el crecimiento en ventas se ha ralentizado en los últimos tres años. A finales de 2016 había en España 19.037 vehículos eléctricos puros. Menos del 0,7% de la flota. Para cumplir con los objetivos que marca la Unión Europea, este país debería tener en circulación 300.000 coches y camiones a pilas en 2020, un objetivo que se antoja inviable. “Esperamos que al menos en 2050 la mitad de los coches que recorran nuestras calles, unos 12 millones, sean eléctricos. Para ello, para 2030, la mitad de los coches que se vendan deben ser cero emisiones”, agrega Sánchez, de Endesa. “Todo depende de la superación de barreras relativas a la infraestructura [puntos de carga] y el ritmo de aceptación del mercado. Algunos países de nuestro entorno nos llevan mucha ventaja. Es el caso de Noruega”, añade. En la nación escandinava casi uno de cada tres coches es eléctrico o híbrido enchufable. Una cifra (28,76%) muy por encima del 6,39% del segundo país con más vehículos electrificados, Holanda, de acuerdo con la OCDE. El Gobierno noruego ha puesto en marcha políticas económicas, como la exención del IVA o del impuesto de matriculación, y también ha fomentado la instalación de puntos de recarga.
 
El precio y la autonomía disuaden a muchos conductores a realizar el cambio. El coste de los utilitarios va de los 22.000 a los 32.000 euros y la autonomía de la mayoría, sin tener en cuenta a Tesla, no supera los 300 kilómetros reales en los modelos más avanzados. Pese a la inversión inicial, sin embargo, la compra se amortiza en pocos años gracias al ahorro en combustible. Este cambio puede reducir la factura anual hasta cinco veces. 
 
El Gobierno lanza planes anuales para fomentar la compra, y los ayuntamientos ofrecen exenciones fiscales y facilitan su movilidad por las ciudades, mientras planean limitar la circulación de los vehículos térmicos para la próxima década.
 
¿Habrá que producir más electricidad?
 
El número total de vehículos crecerá en los próximos años. Los cálculos energéticos realizados hasta ahora solo sirven para probar que hoy podrían recargarse sin grandes problemas un parque 100% eléctrico, si de golpe se sustituyeran todos los de combustión. La Agencia Europea de la Energía plantea un escenario para 2060 en el que el 83% de los coches serán eléctricos o híbridos enchufables. La demanda de energía que generarían sería de 4.200 TWh. El consumo de Estados Unidos hoy o el 21% de toda la energía que se consumió en la Tierra en 2016 (más de 20.000 TWh). "Es una cantidad considerable, pero manejable, tan solo una fracción de toda la energía que demandará el crecimiento económico en las próximas décadas, especialmente en los países en desarrollo", concluye Gorner.
 
Si ponemos de nuevo la mirada en Europa, en un escenario en el que el 80% del transporte fuera eléctrico, la capacidad energética del continente tendría que crecer 150 gigavatios, lo que supondría un 15% más del actual sistema eléctrico de la Unión Europea. Simultáneamente, de acuerdo con la directiva de eficiencia energética, Europa debe reducir un 30% el consumo de energía final hasta 2030. Esto no significa que usaremos menos aparatos eléctricos y electrónicos entonces, sino que consumirán menos vatios.
 
Hasta 2030 el incremento en el consumo no será significativo (en torno al 5%). Para 2050, sin embargo, con un escenario en el que el 80% de los vehículos estén electrificados, se espera que las redes europeas inviertan, de media, el 9,49% de toda la electricidad para moverse, según la Agencia Europea del Medio Ambiente (AEMA). La cantidad variará según el sistema eléctrico de cada país, en un rango que va desde el 3% en Bulgaria al 25% en Luxemburgo. En España, según estos cálculos, se destinará el 8,1% de la electricidad a la movilidad. Menos de la mitad que haría falta hoy en un escenario 100% eléctrico.
 
¿Es más ecológico?
 
El coche eléctrico es uno de los principales aliados mundiales para luchar contra el cambio climático. Aunque por su propia naturaleza, es más eficiente que uno de combustión. “Un eléctrico consume entre 13 y 17 kilovatios hora cada 100 kilómetros; uno convencional, gasta entre 6 y 7 litros para la misma distancia, lo que equivale aproximadamente a 45 kilovatios hora”, asegura Paco Segura, de Ecologistas en Acción.
 
Las energías renovables, por tanto, pueden ser la fuente clave para potenciar el impacto positivo del vehículo eléctrico, algo en lo que coinciden los expertos consultados. La generación de renovables debería crecer un 22% para cumplir con los objetivos acordados en París de 2015. Si la demanda se cubre con electricidad generada por energías fósiles la reducción de emisiones será muy baja.
 
La recarga con renovables implica adecuarla a las horas de mayor producción: si se trata de fotovoltaica, será durante las horas de más sol del día, si es eólica, en los momentos en los que más viento se genera y por la noche, cuando la demanda es más baja. Según un estudio de Endesa de 2015, un coche eléctrico en circulación emitiría entre 10 gramos por kilómetro recorrido de CO2 si se carga mediante renovables y 50g/km de CO2 con el mix de generación eléctrica promedio actual. Eso en España, por donde circulan más de 8.000 turismos eléctricos como el que usa Cristina Calvo para ir al trabajo, llevar a sus hijos al colegio o salir de compras. Si condujera por las carreteras de Francia, por ejemplo, las emisiones bajarían a 14 gramos por kilómetro recorrido debido a la apuesta del país galo por la energía nuclear. Esta cifra sube de manera notable en estados en cuya producción eléctrica predominan las energías fósiles, como Polonia. Allí los trayectos de Calvo contaminarían hasta 124 g/km, una cantidad que reduciría el impacto positivo del medio de transporte que, según las predicciones, llenará, con su silencioso movimiento, las ciudades de todo el mundo. 
 
 
 
 
 
 
Vehicles fueled by batteries are the near future. Could our electric system supply energy for all the future charges?
 
Cristina Calvo uses an electric car since one year. "I go to work, to pick the children up and even go shopping using it", she says. This 50 years old engineer drives a zer emossion car, as the 19.037 pure electric (8.041 domestic) registered in 2016 in Spain, she could park for free in many places and drive through the city in pollution restriction. Batteries one are only a 0,07% of Spanish parking population. They are not big consumers of electric energy but, if they become regular vehicles? Would be our net ready for supplying if all drives imitate Cristina Calvo?
 
"It is", assures Rafael Sánchez, Endesa ́s analytical research man in charge "The current net can fuel the current population [more than 28 million in Spain] with a proper structure”, adds the economist.
 
"People think that energy is strongly dedicated to produce electricity, but it is just a 20% of Spanish primary energy. For transporting we use the double quatity", says Paco Segura, general manager of Ecologistas en Acción. Actually, transport is the main oil consumer sector, 67%. In Spain only a 10% of our electicity comes from fuel and a 25% from gas.
 
It also will happen in USA and Europe. Agencia Internacional de la Energía (IEA) assures that a 100% electrical park is possible. "Our data shows that with a flexible demand this is something sustainable", explains Marine Gorner, IEA ́s spokeswoman. Gorner says that if the question is hypothetical, the real one is about capability to generate enough energy.
 
How much energy we need?
 
Dole a 18% or 19% of the energy produced in Spain would have to be destined to a fully electric park, according to an Eurelectric and Endesa report from 2015, report showed to European Parliament. This amount grows up til' 21% in Europa, where 249 millions of vehicles are drive, according to Endesa, in 2014 the consume was a 0,03% of all generated energy, according to Agencia Europea del Medio Ambiente.
 
If all of the 1.200 vehicles of the world were electric they would need 2.300 TWh per year, with an average of 13.000 km per year and a consume of 0,18 Kw/km . This is a 10% of all the energy consumed all over the world in 2016, Agencia Internacional de la Energía declares.
 
How many electric cars there will be?
 
Nowadays there are more than 2 million electric. Only 0,2%, but their rising its unstoppable. In 2015, worldwide stock reached the million. It doubles its amount just in one year. China and USA are the direct answer of this. This speed must be accelerated to reach the global warming commitments of Paris and arriving to 600 million in 2040.
 
In Spain, has been slowed down in the last three years. At the end of 2016 we had 19.037 vehicles. Less than 0,07 of the park. Reaching European Union ́s aims means 300.000 vehicles in 2020, something that right now seems very difficult. “We hope that in 2050 at least half of the cars in Spain will be electric. In 2030, half of the selling cars should be electric”, adds Sánchez from Endesa. "Everything depends on structure of charging. Some countries are on advantage. Norway indeed”. In the Scandinavian country almost one of every three cars is electric or plugged hybrid. An amount (28, 76%) that surpasses the 6, 39% of the second one, Holland, according to OCDE. Norwegian government released economic policies, as free IVA , and it have promoted charge stations all over the country.
 
Price and economy are the two obstacles argued by potential customers. Prize ranges from 22.000 to 32.000 and autonomy -except for Tesla- runs about 300 km even in the most modern models. Initial investment is recovered by the saving of fuel, reducing the yearly bill even five times.
 
Government announces release plans for purchasing vehicles and councils offer tax exemptions and a web of mobility in big cities while they plan to reduce the number of fueled vehicles in the next years.
 
Is there a need to produce more electricity?
 
The number of vehicles will rise. Current predictions only show the possibility of a 100% electric park. Agencia Europea de la Energía assures than 83% of cars will be electric in 2030. They will demand 4.200 Twh, current USA consumes or 21% of the global consume in 2016 (more than 20.000 TWh). "The amount is quite big, but we can handle that just with a single part of the needed energy in the future, including countries in development", says Gorner.
 
Putting the target on Europe, if 80% of the transport were electric we would increase the production 150 Gw, it means a 15% plus of the current European system. Simultaneously, according to the directive of energetic efficiency, Europa should reduce the production of energy in 30% before 2030. This does not mean that we won ́t use more electric gods but produce less energy.
 
Until 2030 the increase won ́t be important (5%). In 2050, however, with a park showing a range of 80% electric vehicles it is supposed an investment of a 9,49% average of all the electricity to move according to AEMA. It may vary in each country, ranging from 3% in Bulgaria to 25% in Luxemburg. In Spain it will be destined a 8.1% to this mobility. Less than a half in a global electric park.
 
Is it better for the environment?
 
Electric car is one of the most powerful weapons against global warming. Though is more efficient than a fueled one "an electric consume from 13 to 17 kw/h each 100 km; a fueled one 6 or 7 liters for the same distance" says Paco Segura, from Ecologistas en Acción.
 
So new energies could be the better alliance for the electric car impact. It is something where all experts agree. New energies should grow up 22% to reach the commitments of Paris 2015. If we continue demanding energy produced from fossil sources the reductions will be very little.
 
Charging by new energies means link them to top hours of consume: if photovoltaic then we wait til’ the sunniest time of the day; if Eolic to the windiest, and we do it probably at night when the demand is lower. According to Endesa research in 2015, an electric car emits 10 g/km of CO2 if charge by new energies and 50g/km of CO2 if the current mixed generation. It is happening in Spain, with more than 8000 vehicles like Cristina Calvo uses. In France, for example, emissions will be reduced in 14 g/km due to the policy of French government supporting nuclear energy. This amount rises in countries with a strong use of fossil energies, as Poland. There, Cristina ́s trips would pollute even 124 g/km, a quantity that will harm the positive impact of electric vehicles that, according to every prediction, will be driven in cities all over the world in the closest future.