Más de la mitad de
los conductores españoles consideran que el vehículo eléctrico es la opción de
movilidad de un futuro a corto plazo donde la ecología, la eficiencia, el confort
y la tecnología dominarán nuestras ciudades y carreteras.
Así lo apunta el estudio Automoción y Sostenibilidad: comportamiento
y actitudes de los españoles, que también concluye que el 36% de los
consumidores se plantea su compra en los próximos años. Que casi 4 de cada 10
personas tengan esta visión optimista, en un contexto en el que la cuota de
mercado de vehículos eléctricos no llega al 0,2% en España, es un claro indicador de que el mercado puede dar un salto exponencial.
Los estudios que publica la
patronal ANFAC muestran que durante el primer semestre de 2016, las ventas de
vehículos eléctricos han registrado un incremento del 150% en comparación con
el mismo periodo del año anterior. A pesar de ello, España continúa lejos de
otros países de nuestro entorno como Alemania o Francia -con un 1%- o el gran referente,
Noruega, con un 14%.
A pesar de estas
buenas perspectivas, para que el sector de los vehículos eléctricos pueda
despegar, se hace necesario invertir en pedagogía y concienciación. Todavía existen falsos
mitos entorno a los vehículos eléctricos y se desconocen todas las ventajas y
beneficios. En este sentido, es imprescindible que las Administraciones se
sumen a la labor de concienciación que ya están realizando algunas
instituciones y compañías del sector, y que impulsen su uso no sólo mediante
los beneficios fiscales existentes (gratuidad de aparcamiento en las zonas
urbanas o exención de pago en los peajes), sino también con una red de infraestructuras
de carga de calidad.
Asimismo, las firmas de
automoción, que están haciendo un gran esfuerzo en el desarrollo y
la producción de vehículos eléctricos cada vez más eficientes e innovadores, deben apostar por una comunicación que emocione a los usuarios y que,
al mismo tiempo, transmita los beneficios prácticos y diarios que supone
conducir un vehículo de 0 emisiones.
La realidad actual demuestra que
los niveles de satisfacción y recomendación de quien ha probado un vehículo
eléctrico son altos, más del 92%. Quien ha conducido un eléctrico coincide
en destacar sus beneficios y virtudes más allá del concepto “sostenibilidad”:
buenas prestaciones para la conducción, confort basado en el silencio y casi
nulas vibraciones.
Además, las firmas de automoción están haciendo importantes esfuerzos
consiguiendo que la autonomía de los vehículos sea siempre mayor (unos 250 km,
cuando el trayecto medio diario de los usuarios no supera los 80 km), que los
costes de mantenimiento sean menores y produciendo vehículos atractivos y
asequibles.
Por lo que respecta al consumo,
quizá el mejor argumento para el cambio a la conducción 100% eléctrica sea el
coste de la recarga completa, que puede llegar a ser entre 6 y 7 veces menor
que en un coche de combustión interna. Por ejemplo, un conductor con un consumo
medio de 17 kWh/100 km puede recargar su vehículo con la tarifa de luz nocturna
súper reducida, lo que se traduce en un gasto de unos 1,55€/100 km (los de
combustión supondrían un coste de 7,79€/100 km).
Las agendas internacionales ya
han marcado fechas concretas. En el ámbito doméstico, de cara al
2020 la Comisión Europea ha dictado como objetivos reducir un 20% las emisiones
de gases de efecto invernadero (en relación con los niveles de 1990), mejorar un 20% de la
eficiencia energética y alcanzar un 20% de energías renovables. Para alcanzar estas metas,
la popularización de la tecnología 100% eléctrica debe ser, pues, un paso
indispensable.
Apostar por el vehículo eléctrico
y las infraestructuras asociadas, promover una legislación favorable a su
implementación y uso o concienciar a los usuarios y futuros conductores es, en
definitiva, hacer que la movilidad eléctrica hable en presente.
Artículo escrito por Marco Toro (consejero
director general de Nissan Iberia).
More than half Spanish drivers think that electric
mobility vehicles are the short-term future where ecology, efficiency, comfort
and technology collide in our cities and roads.
A research titled Automotive study
and Sustainability: behavior and attitudes of the Spaniards points that
direction, showing a 36% of consumers thinking
about buying a vehicle of this type. Almost 4 of each 10 persons have an
optimistic view within a context that doesn’t reach a 0.2% share of electric
vehicles; being a bright indicator about
an exponential leap in the market.
Reports published by ANFAC employers show that during the first half of
2016 the sales of electric vehicles increased in a 150% if compared with the
same period of 2015. Nevertheless, Spain is not close to countries like Germany
or France (1%) or Norway (14%).
Despite these good prospects for the sector
it is needed an investment in awareness and education. There are still myths about electric vehicles
and most of their advantages remain unknown. In this sense, it is essential to
local governments to advocate about their use as some companies do not focusing
only in the benefits related to taxes (free parking in urban areas or exemption
payment dolls) but a quality network of charging infrastructure.
Therefore, automobile brands
are making a great effort in the development and production of electric
vehicles more and more efficient and innovative. They must focus on communicate exciting information to users and -at
the same time- convey the practical and daily benefits involved in driving a 0%
emission vehicle.
Our current reality shows a high satisfaction level in people that have
tested that kind of vehicles (more than 92%). Those who have driven an electric car agree with to remark the benefits
beyond the idea of sustainability: comfortable driving vibration less and
silence. In addition, brands are making significant efforts giving a wider
autonomy to the vehicles (around 250 km, being the average daily use about km),
lower maintenance costs and production of more attractive vehicles.
As regards consumption, probably the best argument for changing to an
electric vehicle is the cost of full recharge; they could be 6 or 7 times lower
than an internal combustion car. For example, a driver with an average
consumption of 17 kWh / 100 km can recharge his vehicle with super reduced rate
night-light, an expense of 1.55 € / 100 km (7.79 € / 100 km in a combustion one).
International agendas have set specific dates. European Commission faces the challenges of reducing greenhouse gases
by 20% (considering the levels in the nineties), improving energetic efficiency by 20% and reaching another 20% of
renewable energies. To achieve these aims, electric cars us must be popular
among drivers and population.
Making a bet on electric vehicles and related infrastructures is, next to
promote laws and education that reinforce their use, the way to let electric mobility
talk in present.
Article by Marco
Toro (director CEO of Nissan Iberia).